En los últimos años, la publicidad exterior ha experimentado una transformación radical gracias al Digital Out of Home (DOOH). Esta evolución de la vía pública tradicional combina la potencia del medio físico con la precisión y flexibilidad de lo digital, ofreciendo a marcas y anunciantes una oportunidad única para conectar con sus audiencias en tiempo real y en contextos relevantes.
El DOOH se refiere a la publicidad en pantallas digitales ubicadas en espacios físicos como calles, centros comerciales, gimnasios, aeropuertos, estadios o estaciones de transporte. A diferencia del OOH tradicional (carteles estáticos), DOOH permite mostrar anuncios dinámicos, actualizar creatividades en segundos y segmentar audiencias según datos de ubicación, clima, horarios o comportamiento de consumo.
Algunos beneficios de este tipo de publicidad son:
- Visibilidad garantizada y no intrusiva: capta la atención en entornos reales sin interrumpir la experiencia del usuario.
- Segmentación avanzada: gracias al uso de datos (geolocalización, tráfico, clima, hora del día).
- Medición precisa y optimización: métricas en tiempo real.
- Flexibilidad: campañas que se activan y ajustan de forma dinámica.
- Sostenibilidad: elimina la necesidad de impresiones físicas y reduce los tiempos logísticos.
DOOH en el mundo y Latinoamérica
El mercado global de DOOH superó los USD 16,7 mil millones en 2023, y las proyecciones indican un crecimiento sostenido impulsado por la programática y la integración con tecnologías como IA, big data y realidad aumentada.
En 2024 generó alrededor de USD 340,7 millones en Latinoamérica, y se espera que alcance los USD 580 millones para 2030 (CAGR 8,8%). Según Statista, en 2025 llegará a USD 618 millones y crecerá hasta USD 819 millones en 2029. Brasil y México lideran, pero países como Argentina, Chile, Perú y Uruguay comienzan a adoptar DOOH como parte central de las estrategias publicitarias.
El desafío: medición y estandarización
Uno de los principales retos del sector es avanzar hacia modelos de medición unificados y transparentes, que reflejen no solo el alcance, sino también el impacto en ventas, tráfico web y sinergia con otros medios. El DOOH debe integrarse como pieza clave en estrategias omnicanal, no como un canal aislado.
Conclusión
El DOOH no es solo la evolución digital de la vía pública: es la convergencia entre el mundo físico y lo digital, capaz de ofrecer impacto visual, segmentación inteligente y resultados medibles. Su crecimiento sostenido en el mundo y en Latinoamérica confirma que es una de las tendencias más prometedoras de la publicidad moderna, preparada para transformar cómo las marcas conectan con sus audiencias.